" Esta mañana me llegó de parte de un mensajero la carta que nunca quise recibir.
Pensaba que por fin todo saldría bien, que iba a terminar de una vez este ahogo que aflige mi cuello cada poco tiempo.
Y así ha sido.
Ahora el ahogo vendrá realmente a mi mediante dulces hierbas y frascos de alcohol para sanar mi ego herido.
Mía fue la culpa de plantar semillas en mi propio corazón del veneno mortal que es el amor.
Me alegra la sinceridad con la que me tratas. Así puedo saber que disfrutamos realmente aquellos buenos momentos.
Si alguna vez se encuentra esta botella, enterrad la semilla que dentro se encuentra a los pies del mejor árbol del bosque.
De ella floreceran las más dulces
flores que jamás llegaron a arraigar."
Página arrancada del diario del capitán del Teseo, encontrada tres meses después de su fallecimiento en alta mar debido a un viejo whisky envenenado.
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